Veamos las cosas de forma positiva: viendo los avances de las negociaciones, lo más probable en cuanto al tema agrario es que se logre finalmente un acuerdo que satisfaga las dos partes: sin reforma agraria integral pero con garantías para mejorar la situación social y económica en el campo.
Edición 53
Del desangre a la conversación: los conservadores y la paz
La posibilidad de la conversación no borra los antagonismos, las diferencias políticas, ni las luchas sociales, pero sí nos ayuda a reconocer la humanidad de los adversarios. Ciertos sectores de la derecha colombiana hoy tienen el reto histórico de abandonar un legado que les ha impedido reconocer la humanidad del otro. De tal reto dependen muchas vidas.
Defender los derechos humanos en tiempo de proceso de paz: una tarea aún más difícil e importante
Los avances significativos en la mesa de negociaciones de La Habana, la existencia de una política oficial de restitución de tierras a las víctimas del conflicto armado (a pesar de sus limitaciones) y el fortalecimiento de los movimientos populares tienen como contraparte la reacción criminal de los enemigos de la paz y de los cambios sociales, que son los mismos enemigos de siempre, ligados al Estado y a poderosos intereses locales.
La protesta social y el reto del postconflicto
Pese al clima favorable a la negociación y construcción de la paz, hoy continúa vigente un complejo dispositivo de criminalización y represión de la protesta, que articula imaginarios, normas, discursos y prácticas, y que plantea un desafío enorme hacia un eventual postconflicto.
Entre la solidez del derecho y la flexibilidad de la política
Aunque muchos sostienen que después de los escollos superados el proceso parece irreversible, las tensiones del primer mes del año dejaron ver que todavía queda un camino largo y difícil por recorrer.
Romper el sentido de la elección: empezando por la Universidad Nacional de Colombia
Hoy en Colombia, el extenso poder de nombramiento directo o indirecto que dispone la Presidencia de la República en las instituciones del país permite considerar al régimen político como siendo más una monarquía administrativa que una república liberal, y aún menos una democracia. El régimen sigue generando y promoviendo conformismo (“gobiernismo”) entre sus sujetos y, a su vez, imposibilita una democratización real de las instituciones políticas y administrativas, ¡inclusive en las “autónomas” como las universidades!
La dignidad de abajo
Rescatando un viejo eslogan del gobierno mexicano, “mover a México”, podríamos afirmar que mientras “México se mueve” y sus instituciones se fortalecen y las reformas económicas avanzan en pro del fortalecimiento del sistema económico, los movimientos sociales, los pueblos dignos y resistentes avanzan con la mirada en alto, fomentando la organización popular, reforzando la memoria y continuando con la lucha social, esa que nace de abajo.
Hacia una revolución mediática
No le preguntes a Walter Blanco lo que puede hacer por Canal Capital, pregúntale a Canal Capital lo que puede hacer por Walter Blanco.