Sobre el caso de Melgar, ciertos “periodistas” discuten si eran 54 ó 53, si quienes aparecen en los videos pornográficos eran todos marines o no, pero se ignora el tema de fondo: existen abusos sexuales, y los responsables (funcionarios, ciudadanos y efectivos estadounidenses) están cobijador por “acuerdos” de impunidad, que han sido ratificados por el gobierno colombiano y representan un oprobio y una vergüenza para cualquier país decente.
Edición 57
Movilizaciones en Haití: la última salida contestataria de los estudiantes
En las manifestaciones de calle, los estudiantes no vacilaron en recurrir a la violencia colérica para hacer entender sus reivindicaciones, las cuales giraban esencialmente alrededor de la baja del costo del petróleo y la liberación de su compañero encarcelado, cuyo estado sanitario era muy crítico, como consecuencia de los golpes y las heridas recibidas durante su detención.
Violencia simbólica en El Quimbo: el mundo al revés
El despojo no solo fue la expropiación de la tierra (en un área en la que muchos fueron clasificados como “no propietarios”), sino la imposibilidad de reproducir las prácticas que realizaban con anterioridad. Los despojaron del poder de decidir lo que querían y los enmarcaron en lo que el proyecto impuso.
Y entre tanto debate de justicia transicional, ¿por qué centramos el debate en la cárcel?
Para el Procurador pareciera que los derechos de las personas (a que no las maten en la guerra o a que no las fumiguen aun sabiendo los impactos en salud, alimentación y ambiente) no debieran ser el objetivo final del sistema jurídico, sino simples herramientas para impedir cambios políticos que beneficien a la sociedad. Mejor dicho, un verdadero exponente del conservadurismo colombiano.
Las derechas
No se enfrentan modelos de país distinto, sino, que asistimos a una pugna de liderazgos personalizados traducidos en rivalidades mediáticas, componendas clientelistas, disputas por control económico y ambiciones burocráticas. Ello sin desconocer los matices en temas cruciales como la paz, aun cuando su alto impacto mediático exacerba las tensiones y construye realidades ficticias que confunden la opinión.
Un paso adelante, dos atrás
Lo ocurrido en el Cauca redujo drásticamente las posibilidades de llegar a un cese al fuego bilateral, retrasando el final del conflicto, y agudizando las confrontaciones.
Después de La Vorágine
Hoy en día es imposible analizar el presente y futuro de las selvas que en el pasado inspiraron a Rivera, sin antes indagar acerca de los efectos que en ellas causa la industria del petróleo.
El castrochavismo: muestra fehaciente de nuestra profunda crisis como sociedad
Solo en un país con los problemas educativos que tenemos y con el tinte autoritario acentuado en los albores del siglo XXI puede hacer carrera y adquirir potencia una expresión tan vacía como el castrochavismo.
Y ¿dónde está la sociedad? Reflexiones en torno al evento del 6 de mayo
El debate sobre qué implica pensar el papel de la sociedad hoy, respecto a los procesos de paz, también lleva implícita una pregunta por la forma como se logra movilizar la sociedad para llevar a cabo la transformación del orden de cosas que hoy vivimos en el país
Amenazas e intimidaciones en las universidades públicas
Las amenazas crean un escenario inverso al que pretendían implantar los amenazadores, es decir, crean en nosotras y nosotros la voluntad de acompañar de la forma más fraterna y abierta a quienes sienten la angustia de ser señalados por quienes no han comprendido que un lenguaje que pretende acallar, deja de ser lenguaje, deja de cumplir la labor crítica que tiene todo ser humano.
Rechazo total a las intimidaciones en la Universidad Nacional de Colombia
Comunicado a la opinión pública En días pasados ocurrió un hecho de extrema gravedad en la Universidad Nacional de Colombia sede Bogotá que no ha tenido el debido rechazo por parte de la opinión pública nacional. Como en otras coyunturas oscuras, circuló un panfleto intimidatorio firmado por “Águilas Negras Bloque Capital” en el que se […]